sábado, 17 de agosto de 2013

Entrevista a Miguel A. Badal en el blog de las Jornadas de Novela Histórica de Granada


 
 
¿Qué es para ti la novela histórica?
 
Ante todo es un género de novela, con todo lo que ello implica. Considerarla de otra manera distinta a esa es errar de manera evidente. A mí me gusta también utilizar esa otra expresión de “ficción histórica”, que deja claro que, ante todo, al enfrentarte a una novela histórica te encuentras frente a una historia inventada que tiene como principal cometido el entretenimiento. Me sorprende a veces la ingenuidad de algunos lectores que llegan a creer hasta la última coma de lo que se cuenta en una obra de ficción, y eso ocurre esencialmente en el ámbito de la novela histórica, lo mismo que sucede con el cine de este tipo. Dicho eso, que me parece una obviedad, sí es necesario dar el valor preciso a la etiqueta “histórica” que define el género, y en ese sentido, a mi juicio, la novela histórica debe distinguirse del resto por el compromiso que el autor adquiere con la propia Historia. El autor, obviamente, es creador de una historia ficticia, pero debe tener en cuenta el marco histórico en el que se esta se encuadra, la propia sucesión de acontecimientos conocidos y la realidad social y mental de ese período concreto. No errar en ninguno de esos aspectos es esencial, pero la necesidad de que la novela sirva también para ilustrar y acercar al lector a la propia realidad que trasciende por encima de la propia ficción de la novela me parece fundamental y determinante. A mi juicio no todas las novelas que cuentan historias que se desarrollan en períodos pasados son necesariamente históricas. Y no digo con ello que no puedan ser magníficas obras, sino simplemente que, por culpa de algunos fenómenos literarios sobradamente conocidos, se ha abusado, y mucho, de la etiqueta “histórica”, haciendo un flaco favor a los seguidores reales del género. 
 

miércoles, 14 de agosto de 2013

Nuevo artículo de Miguel A. Badal sobre la presencia vikinga en la Península Ibérica.

"La amenaza vikinga en los reinos cristianos peninsulares" es el título del artículo de Miguel A. Badal que, en su nuevo número, publica la revista MEDIEVAL. En el mismo, Miguel A. Badal ahonda en la importancia que tuvieron los ataques vikingos sufridos por el litoral septentrional de la Península Ibérica entre mediados del siglo IX y finales del XI.


 
 


martes, 13 de agosto de 2013

La amenaza vikinga en los reinos cristianos (2013)


La Crónica Anglosajona anota que en el año 789 fueron avistados tres barcos daneses frente a las costas de Cornualles. Es la primera vez que una fuente escrita hace alusión a las conocidas embarcaciones de los vikingos. Eran naves de bajo calado, de gran maniobrabilidad y especialmente diseñadas para el cabotaje y el remonte de los ríos, que permitirían a los llamados hombres del norte alcanzar hasta el último rincón de la Europa feudal. La noticia de la crónica inglesa sorprende por su vaguedad, aunque anticipa lo que iba a suceder pocos años después: en 793, esta misma fuente registra como aquellos piratas paganos devastaron el santuario de San Cutberto, en la isla de Lindisfarne, y pasaron a cuchillo a todos los monjes que lo habitaban. Con dicho ataque comienza lo que la historiografía tradicional conoce con el nombre de “la Era Vikinga”, un período de cerca de trescientos años en el que las costas de la Europa atlántica habrían de recibir la reiterada visita de estos piratas nórdicos.

sábado, 3 de agosto de 2013

Juan Gaspar Badal Salvador gana el premio de relato histórico breve 'Álvaro de Luna'

Juan Gaspar Badal Salvador, hermano del escritor Miguel A. Badal, ha sido el ganador de la XI edición del Certamen 'Álvaro de Luna' de relato histórico breve con su trabajo 'La palabra dada'.



A lo largo del día se llevarán a cabo diferentes homenajes. Tras la batalla, se entregará el premio al ganador del certamen de relato histórico breve “Álvaro de Luna”, que este año ha recaído en el autor conquense Gaspar Badal. Por la tarde, se hará entrega del premio honorífico de “Cañetero de Honor” para Emilio Escutia, incansable promotor de Cañete y de sus fiestas de La Alvarada y de la Virgen de la Zarza. También se nombrará “Comendador Mayor” a Don Luis Manuel Leal, el conocido caballero negro del grupo Legend, que cada año se encarga de amenizar el tradicional torneo en el palenque de Cañete.